jueves, 18 de julio de 2013

No tengo arreglo, puedes tirarme.


Una vida escrita en un libro no me vale para contar todo el dolor que cabe,
que no cabe más porque rebosa,
que duele,
no sabes cuánto,
ni cómo,
ni por qué.

Nunca visitaré París,
nunca me quedaré con esta vida
sin quedarme primero con mi muerte.

Libros cerrados de punta a punta,
ojos con mares disparando,
por no acertar en esta jaula,
por no querer más
porque no se puede,
por querer, quisiera no querer nada,
y he acabado no queriéndome.

Así que, normal; yo tampoco me quedaría en mi vida si pudiera irme.

Ya sé que estorbo en cualquier parte,
que no sé más de lo que no quiero ver,
que no veo más,
porque quiero echar a correr.


Ni consuelo, ni abrazo, ni besos, ni noches, ni días.

No queda nada.


2 comentarios:

  1. Seguro que no estorbas en cualquier parte... pero si no queda nada...

    Tienes un premio en mi blog, un beso!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por el premio y esas cosas. Pero premio ya es que alguien me lea :)
      Un beso :)

      Eliminar