Ahora ya no creo. No creo en nada. Me miro en el espejo y no me creo, porque todo lo que se destruye no se puede volver a construir. Ahora no siento paz, ni quiero dar guerra. Ahora contemplo el silencio como una bala que me atraviesa llevándose todo lo que hay dentro, pero sale poco a poco. Me desangro. Ahora me desangro. Ahora que sé que no volvería. Ahora que sé que ya nunca. Ahora que se han acabado todas las partidas, que la máquina está rota. Ahora que ni si quiera puedo desearte que seas feliz. Ahora que el resto me da igual como antes, pero ahora el resto somos todos. Ahora que mamá me llama y no sabe dónde estoy, ni yo tampoco. Ahora que paseo sola por calles en las que no habita nada. Ahora que no me gusta la ciudad, que no puedo pasear contigo, que no me gusta el campo, que maldigo la tierra, que me falta el aire. Ahora que lo único que queda es cerrar los ojos para que mamá vea que su hijita al menos así está tranquila. Ahora que me desvelo y siempre tengo pesadillas. Ahora que me sobra tiempo. Ahora que me sobran palabras. Ahora que no puedo ser, ni estar, que sólo puedo parecer. Ahora que me reconocen triste y se atreven a preguntar pero yo no a responder. Ahora que no sé cuándo dejaré de llorarlo todo. Ahora que mastico la soledad. Ahora que el "nosotras" se quedará en la cuneta. Ahora que nos hemos abandonado. Ahora que sólo tomo pastillas y mucha agua, doctor, y mucha agua. Ahora que nadie lo entiende. Ahora que no hay luz y nadie la enciende. Ahora.
Ahora que no seré un caballito de mar, vendrán otras. Pero no tendrán tus manos. No me calmarán con tu voz. Que no les gustarán las mismas películas que a mí no. Que no me llamarán por los mismos nombres que tú. Que no coserán en mi cuerpo las heridas que me hicieron. Que nadie más tendrá ese derecho. Que no volveré a tropezar con nadie dos veces. Que no volveré a mirar a otro lado por no ver que algo va mal. Que no volveré a volcar mi vida. Que no guardaré los recuerdos de nadie. Que no dejaré de hacer algo por tener a alguien. Que no dejaré que vuelvan a hacerme feliz como lo hiciste tú para luego tener que decir adiós. Que algún día me encontraré con alguien y seré sólo yo. Pero, ¿Ahora que hago con toda esta rabia? ¿Con todo el deseo de que sientas lo que siento? ¿Con todo el odio que sólo sientes cuando sabes que realmente se ha acabado?
Y que no es mejor así, para qué más daño.
Y que no es mejor allí, para qué más daños.
Y que no es mejor sin mí, para qué más años.